Si hay algo que me angustia mucho es dar mal las indicaciones cuando alguien me pregunta por una calle.
El otro día estaba caminando por un barrio y delante mio un chico le preguntó a una señora que llevaba bolsas de supermercados donde quedaba una calle bastante conocida. La señora le contestó que no sabia y el pobre pibe siguió su perdido camino.
Yo, en ese momento, pensé como podía ser que una persona que es del barrio no supiera indicar una calle.
Dos días más tarde, caminando por casa, para un auto y me pregunta por una calle. Totalmente segura, le indico donde tenia que doblar y cuantas cuadras tenia que hacer para llegar a destino. Apenas pierdo el auto de vista, me doy cuenta que le dije todo mal, que el pobre pibe iba a estar dando vueltas, cuando la calle por la que me había preguntado estaba a dos cuadras de casa!

Me pone muy mal dar mal las indicaciones, me quedo con culpa, pienso en como me debe estar puteando la persona, y de paso me castigo a mi misma por ser tan boluda.
Así que ya saben, si algún día se cruzan con una chica de veintitantos, con los auriculares puestos, sigan de largo y pregunten al primer kioskero amigo que encuentren.

Vi una paloma saltar. No caminar, no volar, no caminar apresurada, SALTAR.

Yo fumando tranquila, y en un cantero, la paloma haciendo lo que hacen las palomas, cuando de repente la miro y la puta paloma salta al suelo.

Desde ese momento no puedo pensar en otra cosa y cada vez que paso por una plaza miro a sus camaradas, esperando presenciar otra vez ese raro fenómeno.

Miren que suerte que tengo..

que mirando el documento aburrida, me dí cuenta que me pusieron la fecha en el cuadradito de la votación, pero no me sellaron ni me firmaron.

Si sigo por este mismo camino, voy a empezar a volcarme al juego así comparto un poco de mi buena fortuna

A vos quiosquero hijo de su re mil puta madre, la cuenta es muy fácil: si yo te doy $10.25 y te pido un Marlboro box que vale $7.25, entonces vos me tenes que dar $5.
Pero si vos te haces el zonzo y revisas y revisas la caja buscando vaya a saber que; solo para darme un billete de $2 y tres monedas que yo pensé que eran de $1, cuando eran en realidad tres monedas de 25 centavos; entonces es más que probable que tengas que bancarte mi cara de orto y mis gritos por aprovecharte de mi cara de buena persona y reclamar lo que me pertenece.

Puto.

He dicho.

Correcion: Al quiosquero le dí $12.25, todo bien separadito los dos billetes y la moneda asi que el turro tenía ganas de cagarme

Día rutinario 1
Voy a la farmacia, espero mi turno mientras me aferro a mi MP3 mientras evito hacer contacto visual con las viejas que siempre buscan charlar. Me dan el remedio, pago, me voy. Llevo el remedio hasta la casa de mi abuela, tomamos unos mates, miramos La Ley y el Orden y jugamos a la canasta (si ya se, tengo una joda yo). Llego a mi casa con la satisfacción del deber cumplido.

Día rutinario 2
En la oficina, me suena el celular, atiendo a pesar que el numero aparece como privado solo para escuchar que me llamaban de la farmacia para avisarme que CHAN CHAN CHANNNNNN me habían dado el remedio equivocado. Puteo un poco, dramatizo la situación a niveles inimaginables y amenazo con represalias legales que nunca llevaré a cabo. Corto, llamo a mi abuela para que por favor no ingiera una pastilla más de ese remedio.

Día rutinario 3
La boluda (o sea moi) corre hasta la farmacia, pone cara de culo por doquier, no le da mucha bola a los pedidos de disculpas de la encargada y lleva, esta vez si, el remedio correcto a su abuela.

Consejo:siempre completen con datos verídicos la parte de atrás de la receta que parece que sí tienen un uso real y no era al pedo (como pensé siempre yo)

Reflexión mañanera

Me estoy dando cuenta lo fácil que tienen la vida los hombres cuando por enésima vez desde que comenzó este frió polar tuve que apoyar, a las siete de la mañana, mi delicado derrièrre en el inodoro.

Siento admiración por la gente que siempre logra empezar un rollo de papel de cocina o de papel higiénico sin romper cuatro o cinco hojas en el intento.
Por más que trato y pruebo una y otra vez, no puedo despegar el principio del rollo de una manera elegante, y siempre termino con un socotroco (alguien sigue usando la palabra socotroco o yo soy la única mongui?) de papel en la mano sintiéndome una inútil.

Nooooo como que necesito invitacion para leer tu blog?????

Si alguna vez me decidiera a tener twitter, seria solo para poder escribir en vivo y en directo sobre el programa de Fantino.
Si alguno de ustedes siente una cierta nostalgia al notar que, finalmente, el fin de semana pasó más rápido de lo que hubieran querido, el programa de Fantino es justo lo que tenes que ver.
Son ocho tipos sentados, discutiendo como unos loros barranchines, casi casi es como ver a Moria Casan pelearse con Ileana Calabro.
Todos tienen actitudes de divas histéricas, siendo su mayor representante Ale Fantino, a quien le encanta creerse que lo persigue Grondona, Maradona y si le tiras un poco de la lengua, hasta la CIA.
Todo el tiempo reciben mensajes con información "top secret" de "altos dirigentes" que nunca nunca te terminan de cerrar.

Para una persona como yo, a la que le quitaron Rial por los malditos cambios de horarios, aplaudo el entretenimiento que me da este programa: discusiones, desplantes, gritos histéricos: que mejor para empezar la semana?

Lluvia cae lentamente sobre mi

Tengo tanta tanta suerte que hoy se decide a llover media hora antes que me tenga que ir del trabajo. Como tengo una vida tan ocupada no tuve tiempo de ver el pronostico, así que ni sabia que existía la posibilidad de lluvia, y por consiguiente no tenia paraguas. Haciendome la valiente decidí irme igual y mojarme lo menos posible. Llego a la parada, y miro esperanzada el horizonte esperando ver aparecer el bendito bondi.

Como ya dije antes, tengo taanta suerte que, por supuesto, el único bondi que no venia era el que yo me tenia que tomar; pero yo estoica parada en la calle con mi pobre alma a cuestas mojandome. En algún momento, se me prende una lamparita y me refugio en la puerta de una casa, y seguí esperando; la gente iba y venia yo seguía esperando.
De repente, un perro cruza la calle y se me acerca, me mira, y se sienta cerca de donde yo estaba. Al perro obviamente también se le prendió una lamparita y decide que va a estar más seco si comparte conmigo mi refugio. Primero mete la cabeza, después pone una patita y termina con todo el cuerpo metido. Que iba a hacer yo en ese momento? Lo más lógico dirán, no no sentí que el perro me echó, así que busqué otro refugio mientras lo recontraputeaba. Desde mi nuevo refugio lo miro al perro y me dió la sensación que tenia cara de loco. A los dos segundos que yo me había corrido, el perro se me vuelve a acercar! Me mira y se sienta a mis pies. De más está decir que me asusté, así que me volví a mi refugio original. Que hace el puto perro? Me mira y se me acerca!!

Ya totalmente fuera de mis cabales, y pensando que el perro al ver mi tierna carnecita iba a querer darle una mordida; cual colegiala asustada tomo el primer taxi que veo venir.

Que aprendemos de esto? No sólo que soy una persona muy susceptible, sino que soy media boluda (si me miran con un ojo cerrado)